Silla de oficina con una llave

Todo empezó cuando a mi hermano le cambiaron la llave del portal y tuvo que hacer nuevas copias, entonces me dijo a mí si quería las viejas y claro de que sí. Entonces no sabía que iba a hacer con ellas, de momento las acumulé en mi mesa junto con un montón de tapones, piezas de bolígrafos y demás tesoros que algún día servirán para algo. Y un día jugando con ellas se me ocurrió que podían ser el respaldo de una silla y este es el resultado:

Las patas están hechas en forma de estrella y en cada punta va pegada una pieza más pequeña con la forma de la punta, después de pegadas las lijé para igualar las dos piezas y redondear la parte superior. En esta foto se ve la diferencia antes y después de lijar.

Estas son las piezas: las patas, un tapón de pegamento, la clavija de unos auriculares, el muelle de un boli y el asiento.

La parte inferior montada:

Dentro del tapón va montado un muelle según el siguiente esquema, el muelle le recorté de modo que en reposo entra justo en el tapón y se pueden pegar las piezas sin problema. El tapón le tuve que rebajar un poco por dentro con ayuda del taladro porque se estrechaba mucho en la parte superior y no entraba bien la clavija. También tuve que agrandar el agujero del abalorio que va pegado bajo el asiento.

De este modo al apretar el asiento de la silla baja un poquito y vuelve a subir, es una tontería como otra cualquiera pero me hacía gracia hacerlo así.

Para  completar un para de detallitos una rueda, hecha con fimo efecto metálico, para regular la altura del respaldo (por si alguien tiene dudas el respaldo ni sube ni baja).

Y la palanca para subir y bajar el asiento, como no, está hecha con uno de los extremos de esos plastiquitos que sujetan las etiquetas del precio de la ropa, pintado de negro y plateado.

Las ruedas son abalorios.

Y aquí la silla en su sitio:



Aún hay un par de cosillas mejorables no me acaba de convencer el tamaño del asiento respecto a las patas, no sé si el asiento es pequeño o las patas grandes, la sujeción del respaldo-llave no me gusta y me he quedado con las ganas de hacer unas ruedas en fimo más parecidas a las de verdad. Pero bueno, estoy contenta con el resultado, es tal y como la imaginé cuando hice el dibujo y al fin y al cabo me queda otra llave para hacer una silla mejorada más adelante. 

Espero que os guste, si a alguien le interesa puedo publicar las plantillas de las piezas de madera.